En el ámbito del derecho de familia, la inscripción de un hijo en el Registro Civil es fundamental para el reconocimiento legal de la filiación. Sin embargo, pueden surgir situaciones complejas, como cuando un progenitor registra al menor en solitario y, posteriormente, se niega a reconocer al otro progenitor. Esta situación plantea importantes implicaciones legales, especialmente para el menor, cuyos derechos podrían verse afectados.

En este artículo, te explico cómo proceder en estos casos, garantizando el interés superior del menor y cumpliendo con la normativa vigente en España.


¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA INSCRIPCIÓN DE AMBOS PROGENITORES?

La inscripción de ambos progenitores en el Registro Civil no solo establece el vínculo legal entre padres e hijos, sino que también garantiza al menor una serie de derechos fundamentales. Entre ellos destacan:

La filiación completa protege el desarrollo integral del menor, asegurando tanto el reconocimiento afectivo como el respaldo económico y social.


SITUACIONES EN LAS QUE UN PROGENITOR NIEGA EL RECONOCIMIENTO

Esta situación puede ocurrir por diversos motivos. En algunos casos, existen dudas legítimas sobre la paternidad o maternidad, mientras que en otros, el conflicto surge por razones personales o emocionales entre los progenitores. También puede darse el caso de que el progenitor que registró al menor haya tomado una decisión consciente de no reconocer al otro.

Independientemente de la causa, el ordenamiento jurídico español ofrece mecanismos efectivos para garantizar el reconocimiento de la filiación, protegiendo siempre el interés superior del menor.


PROCEDIMIENTO PARA INSCRIBIR AL HIJO CUANDO UN PROGENITOR NIEGA EL RECONOCIMIENTO

Si uno de los progenitores se niega a reconocer al otro, existen procedimientos legales claros para corregir esta situación. A continuación, se detallan las principales vías:

1. Reclamación por vía judicial

Cuando no se obtiene un reconocimiento voluntario, el progenitor afectado o el propio menor, a través de su representante legal, puede iniciar un proceso judicial de reclamación de filiación.

Este procedimiento se basa en la presentación de pruebas que acrediten la relación filial. Entre las pruebas más habituales se incluyen:

Si el juez considera que existen indicios suficientes, se ordenará la práctica de la prueba de ADN. En caso de negativa injustificada a realizarla, esta actitud puede interpretarse en perjuicio del progenitor que se niega, favoreciendo el reconocimiento de la filiación.


2. Pruebas de ADN

Las pruebas de ADN se han consolidado como el principal medio de prueba en los procesos de reclamación de filiación. Su carácter concluyente permite despejar cualquier duda sobre la relación biológica entre el menor y el progenitor reclamado.

El Código Civil establece que, si una de las partes se niega sin justificación válida a someterse a la prueba de ADN, el juez puede considerar esta negativa como un indicio a favor de la existencia de la filiación.


3. Sentencia judicial

Tras analizar las pruebas presentadas, el juez dictará una sentencia en la que se reconocerá o desestimará la filiación.

Si se reconoce la filiación, esta sentencia servirá de título para realizar la inscripción en el Registro Civil. Además, desde el momento de su reconocimiento, el progenitor tendrá todas las obligaciones y derechos inherentes a su condición.


CONSECUENCIAS LEGALES DEL RECONOCIMIENTO FORZOSO

El reconocimiento judicial de la filiación no solo afecta al ámbito registral, sino que conlleva una serie de consecuencias legales para el progenitor reconocido:

En caso de que el progenitor reconocido continúe negándose a ejercer sus responsabilidades, se podrán iniciar procedimientos judiciales adicionales para garantizar el cumplimiento de sus obligaciones.


¿QUÉ OCURRE SI EL PROGENITOR SIGUE SIN ASUMIR SUS RESPONSABILIDADES?

El reconocimiento de la filiación no es solo una cuestión formal. Implica una serie de responsabilidades legales que deben ser asumidas por el progenitor reconocido.

Si este incumple sus deberes, especialmente en lo que respecta a la pensión de alimentos o el régimen de visitas, el otro progenitor o el representante legal del menor podrá:

El incumplimiento de estas responsabilidades puede tener consecuencias civiles y, en casos graves, penales.


IMPORTANCIA DE CONTAR CON ASESORÍA LEGAL ESPECIALIZADA

Los procesos de reclamación de filiación son complejos, tanto a nivel jurídico como emocional. Por ello, contar con un abogado especializado en derecho de familia es esencial.

Un profesional experimentado podrá:

Además, la intervención de un abogado garantiza que el proceso se desarrolle con todas las garantías legales, evitando dilaciones innecesarias y conflictos prolongados.


OLGA SAMANES ALCOYA
Abogada especializada en Derecho de Familia
+34 632 60 26 47 – Pamplona, Navarra, España
osamanes@micap.es